Latinos de la tercera edad en Nueva York enfrentan pobreza y aislamiento

En la ciudad de Nueva York, los adultos mayores de origen latinoamericano enfrentan desafíos significativos relacionados con la pobreza y la soledad. A pesar de años de trabajo y contribución a la sociedad, muchos se ven obligados a continuar laborando en su vejez debido a pensiones insuficientes y falta de acceso a una jubilación digna, según un reciente reportaje del periódico El País.
Un ejemplo es Guadalupe "Cholo" González, residente del sur del Bronx, quien a sus 71 años mantiene abierta su tienda de discos para complementar su pensión y cubrir gastos médicos relacionados con el cáncer de hueso que padece. "Llevo 14 años cogiendo el Seguro Social, no es mucho. Tengo que seguir trabajando", afirma González.
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La situación es aún más precaria para aquellos que no cuentan con ciudadanía estadounidense. Óscar, un mexicano de 68 años, se gana la vida tocando la guitarra y la armónica en los vagones del metro. Llegó a Estados Unidos hace 18 años huyendo de la violencia en su país natal. "Si no toco, no tengo para comer", comenta Óscar, quien prefiere no revelar su apellido por motivos de seguridad.
Según datos de la ciudad de Nueva York, de los 1.77 millones de personas mayores de 60 años, el 23% son hispanos. Este grupo presenta una tasa de pobreza del 23.5%, la más alta entre todos los grupos de adultos mayores en la ciudad, según el Center for Urban Future. Además, solo el 23.3% de los latinos posee un título universitario o superior, en comparación con el 46.1% de las personas blancas no hispanas, lo que limita sus oportunidades laborales y de ingresos.
La falta de acceso a atención médica adecuada y la discriminación por edad en el mercado laboral agravan la situación de los adultos mayores latinos. Muchos enfrentan barreras lingüísticas y culturales que dificultan el acceso a servicios esenciales, contribuyendo a sentimientos de aislamiento y depresión.
Iniciativas comunitarias buscan mitigar estos desafíos. En Jackson Heights, Voces Latinas organiza grupos de manualidades donde los adultos mayores pueden socializar y combatir la soledad. Estas actividades no solo ofrecen un espacio de recreación, sino también una red de apoyo crucial para su bienestar emocional.
La historia de Óscar refleja el deseo de muchos de regresar a su país de origen, pero las circunstancias económicas y familiares a menudo lo impiden. "Aquí no vivo, aquí sobrevivo", expresa, evidenciando la lucha diaria por mantener una calidad de vida digna en una de las ciudades más caras del mundo.