Recommended

La página actual: Iglesia & Ministerio |
Iglesia Grace Community demandada por ex-empleados y multada por incidente de exposición al asbesto

Iglesia Grace Community demandada por ex-empleados y multada por incidente de exposición al asbesto

John MacArthur, author and pastor of Grace Community Church of Sun Valley, California, speaks at the Shepherds' Conference on Wednesday, March 9, 2022. | | Screengrab: shepherdsconference.org/

La Iglesia Grace Community (GCC por sus siglas en inglés)ha sido acusada de despedir injustamente a tres empleados de mantenimiento que se quejaron de haber estado expuestos al asbesto mientras trabajaban en una propiedad perteneciente a la iglesia. La congregación, ubicada en el sur de California, recibió una multa de más de $1.100 por parte del estado por violaciones a la seguridad laboral.

Mauricio Calderón, José "Tony" Lara y Chad Pritchett presentaron una demanda ante el Tribunal Superior de California en el condado de Los Ángeles. Una fuente familiarizada con la situación y con los demandantes proporcionó una copia de la demanda a The Christian Post.

[Estamos en WhatsApp. Empieza a seguirnos ahora]

Según la demanda, la iglesia, dirigida por el recientemente fallecido autor y pastor John MacArthur, compró una propiedad de 1.8 acres en Arleta, California, con la intención de convertir el espacio en una escuela primaria. Calderón, Lara y Pritchett trabajaban en el lugar.

Reciba GRATIS nuestras últimas noticias

Suscríbase para recibir un boletín con las noticias más destacadas (¡además de ofertas especiales!) de The Christian Post. Sea el primero en enterarse.

En enero, los demandantes dicen que descubrieron pisos en la propiedad que parecían contener asbesto. Según la demanda, cuando informaron de esto a su superior, él les aseguró que se habían realizado pruebas y que el piso no contenía asbesto. Al día siguiente, el supervisor dijo que había mentido; nunca había hecho pruebas de asbesto en el lugar, según la demanda. Los trabajadores también habían expresado su preocupación a otros líderes de la iglesia.

Los demandantes y otros obreros procedieron a trabajar en la propiedad sin ningún equipo de protección apropiada en caso de haber asbesto, hasta que un subcontratista les alertó sobre la presencia real de asbesto en el piso.

"En los días siguientes, GCC nunca proporcionó a los demandantes los resultados de las pruebas de asbesto. GCC no tomó medidas para remediar el sitio", alega la demanda. "GCC no cerró el sitio. En cambio, el sitio permaneció abierto".

El 13 de febrero, Calderón recibió los resultados de una muestra que él mismo había enviado a un laboratorio, lo que confirmó que había asbesto en el sitio de construcción, según la demanda.

"Y los demandantes habían estado llevando fibras de crisotilo invisibles, peligrosas y potencialmente mortales (asbesto) desde este futuro sitio escolar directamente a sus familias", agrega la demanda.

Cuando los tres empleados se negaron a trabajar en la propiedad hasta que se eliminara el asbesto, según lo dicho en la demanda, la iglesia los acusó de "difundir falsedades sobre el asbesto y generar drama".

"GCC les dio dos semanas para renunciar voluntariamente, poniendo en riesgo sus reputaciones dentro de la Iglesia y el impacto que eso tendría en sus hijos", se lee en la demanda. "Los demandantes no renunciaron, por lo que después de dos semanas, GCC los despidió en represalia por sacar a la luz su ocultamiento del peligroso asbesto al que GCC los había expuesto".

La solicitud realizada a varios pastores y ancianos de la iglesia no lograron revertir el despido.

La demanda acusa a GCC de represalias contra los denunciantes y despido injustificado en violación de las políticas públicas, y solicita un juicio por jurado para abordar sus quejas.

La propiedad fue objeto de una inspección por parte de la División de Seguridad y Salud Ocupacional de California (Cal/OSHA) después de que se presentara una queja confidencial.

Un portavoz de Cal/OSHA informó a Christian Post el martes que el caso se cerró el 15 de agosto, diciendo que hubo "una violación general con una sanción civil de $1.125 emitida a este empleador por una violación del Título 8, Sección 1529 sobre Asbesto".

The Christian Post se ha comunicado con la Iglesia Grace Community con respecto a esta demanda. Un representante respondió el viernes que la iglesia "no tiene comentarios" sobre la demanda y es probable que desconozca la misma.

En un comunicado enviado por correo electrónico a Christian Post, Lara dijo que estaba molesto por la supuesta "negativa a asumir la responsabilidad" por parte de GCC, "incluso después de que me mantuvieron allí trabajando en un ambiente peligroso después de haber sido advertidos". 

"Se supone que esta iglesia es la luz del mundo, y que nos pisoteen a nosotros, a nuestras esposas, a nuestros hijos, es simplemente un testimonio horrible", declaró Lara.

Pritchett dijo que "ser tratado así fue absolutamente horrible" e incluso "mucho peor que en el mundo secular", ya que "todos los contratistas saben lo malo que es el asbesto".

"Querían apresurar este trabajo para poner a un montón de niños pequeños allí para la escuela, y si no hubiéramos hablado, si OSHA no hubiera cerrado el lugar, apuesto a que estarían allí ahora mismo, respirando Dios sabe qué", dijo Pritchett.

Calderón dijo en su declaración que había mudado a su familia a Los Ángeles para involucrarse en la iglesia, no solo trabajando sino también organizando clases de estudio bíblico.

"Y luego, cuando ocurrió este comportamiento pecaminoso hacia nosotros, nadie quiso hacer nada", afirmó. "Lo llevé a los ancianos en privado, algunos de ellos simpatizaron, pero al final del día, ninguno de ellos dio un paso al frente para hacer lo correcto; simplemente se lo tragaron todo".