Asegura que oyó a Dios hablar... y lo que ocurrió después sorprendió a sus médicos
Christopher Gunderson pasó los primeros 16 años de su vida sin poder comer y con una necesidad desesperada de intervención médica para sobrevivir.
Pero Gunderson, nacido con síndrome de pseudoobstrucción crónica, una enfermedad en la que el tracto gastrointestinal no puede absorber adecuadamente los alimentos, experimentó un milagro que lo cambió todo.
[Estamos en WhatsApp. Empieza a seguirnos ahora]
"Nací... básicamente, con el estómago completamente paralizado", declaró a CBN News. "Lo llaman gastroparesia completa, y no bombeaba nada del estómago al intestino delgado".
Reciba GRATIS nuestras últimas noticias
Esto significaba que Gunderson, cuya historia se relata brevemente en el nuevo documental de CBN "Investigando lo Sobrenatural: Milagros", vomitaba cada vez que comía, lo que le hacía casi imposible alimentarse.
"Mis padres y los médicos necesitaron varios estudios y pruebas diagnósticas para determinar que realmente era así, que tenía gastroparesia completa", dijo.
Los médicos se vieron obligados a insertarle dos tubos en el cuerpo. Uno, que entró en su estómago, descomprimía todo lo que tragaba para tratar de ayudarlo a procesarlo.
Otro tubo, conectado al intestino delgado de Gunderson, le permitía obtener nutrición de fórmula, algo de lo que dependió durante sus primeros 16 años de vida. A medida que envejecía y se volvía más activo, la situación se volvió más difícil de manejar.
"La bilis me subía al estómago y me causaba acidez estomacal severa a diario", dijo Gunderson. "Tenía que drenármela constantemente durante la noche y el día".
Con el tiempo, los médicos comenzaron a temer lo que podría suceder debido a la falta de nutrición y las complicaciones.
“A mis padres les dijeron varias veces que los médicos no sabían cuánto tiempo iba yo a vivir”, dijo Gunderson, señalando que había tenido septicemia e infecciones. “Nunca me lo dijeron, por lo cual estoy agradecido”.
Gunderson se crio en un hogar cristiano, pero era escéptico de que los milagros siguieran ocurriendo. A pesar de esa creencia, él y su familia asistieron a un evento en 2011 con Bruce Van Natta, un líder ministerial cuya propia historia de sanidad milagrosa al ser aplastado por un camión y sobrevivir ha dado lugar a discursos, charlas y libros.
“Mi madre escuchaba su testimonio, y durante todo el tiempo que Bruce hablaba, mi madre escuchaba a Dios diciéndole que fuera a hablar con él”, dijo Gunderson. “Estaba usando muchos términos médicos familiares que la mayoría de la gente no entendería debido a lo que Bruce había pasado y lo que yo he pasado”.
Su madre terminó acercándose a Van Natta. Aunque Gunderson no estaba allí en ese momento, le preguntó a Van Natta si podría orar por su hijo. Van Natta accedió y le dijo a la madre que trajera a su hijo al día siguiente para escucharlo hablar, y así lo hicieron.
La familia no lo sabía, pero algo grande se avecinaba.
“Cuando estuvimos en esa iglesia al día siguiente, tuve una sensación palpitante en el abdomen que no había tenido antes”, dijo Gunderson. “Y pensé: ‘¿Qué está pasando?’. Y Dios me dijo: Él me está preparando. Y realmente nunca antes había escuchado tanto de Dios en mi espíritu. No sabía cómo… escuchar su voz, escuchar la voz del Espíritu Santo”.
En esos momentos de diálogo con Dios, Gunderson dice que hizo una promesa.
“Durante ese tiempo que tuve esa sensación palpitante… dije: ‘Si me sanas, no me callaré. Le contaré a todo el mundo sobre este testimonio, sobre este milagro que hiciste por mí’”, recordó.
Después de que Van Natta hablara, Gunderson y su familia se acercaron a él y Van Natta le puso la mano sobre los hombros y comenzaron a orar... fue entonces, según Gunderson, cuando se produjo un verdadero milagro.
“Él empezó a orar por mí, y empecé a tener esa sensación palpitante de la que hablaba antes, pero en un grado casi de un décimo”, dijo Gunderson. “Se siente como cuando flexionas el abdomen, que se repite una y otra vez”.
Continuó: “Y entonces, aproximadamente a la mitad de la oración, sentí una descarga eléctrica como un rayo que me recorrió el hombro derecho, el pecho y el abdomen, y sentí como si Dios me hubiera devuelto el aliento con una descarga eléctrica”.
Gunderson describe la experiencia como "bastante dolorosa", y Van Natta comentó que debían seguir orando. Una vez terminadas las oraciones, Gunderson no sabía qué pensar.
"De hecho, esa noche tuve un partido de baloncesto", dijo. "Y, después del partido, salimos a cenar".
Pero hubo algo muy diferente en esa cena. Gunderson pudo tragar toda la comida sin dolor abdominal: la primera comida completa que había comido.
"Mi intestino delgado nunca había tenido que ingerir nada más que leche de fórmula", dijo. "Yo no tenía miedo. Estaba más lleno de emoción y alegría, y lo sentí como algo surrealista".
Durante las siguientes semanas, Gunderson se mostró cauteloso, pero pronto llegó a creer que Dios lo había sanado. Pronto, le quitaron las sondas de alimentación y finalmente se las retiraron.
Los médicos se sorprendieron, e incluso se mostraron escépticos, al saber que Gunderson ya no tenía sondas de alimentación y que podía comer. Con el tiempo, sin embargo, se hizo evidente que algo había cambiado y los médicos estaban exaltados, a pesar de no poder explicar lo sucedido.
Gunderson, sin embargo, sabe que ocurrió un milagro. La experiencia le cambió la vida por completo.
“Antes veía a Dios como un ser superior que simplemente está ahí arriba y no tiene una relación profunda ni significativa con nosotros”, dijo. “Y ahora, realmente tengo una conexión interior con Él”.
Watch him tell the full story. For more journeys like this, stream “Investigating the Supernatural: Miracles.” We’ll leave you with the trailer:
Véalo contar la historia completa. Para más experiencias como esta, vean “Investigando lo Sobrenatural: Milagros”. Les dejamos el tráiler:
