Sospechan que incendio que destruyó histórica iglesia canadiense fue provocado
Un incendio que destruyó una histórica iglesia anglicana en Canadá el año pasado está siendo investigado como un incendio provocado. Esto ocurre mientras la nación enfrenta un aumento en los ataques incendiarios contra iglesias.
La Iglesia de Santa Ana de Toronto, una congregación de la Iglesia Anglicana de Canadá, fue destruida por un incendio que consumió por completo la estructura el 9 de junio de 2024.
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El Servicio de Policía de Toronto anunció el lunes que las autoridades ahora investigan el incendio como un “presunto incendio provocado”.
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En respuesta a la noticia, la Diócesis Anglicana de Toronto y la Iglesia de Santa Ana emitieron una declaración conjunta expresando su tristeza y agradeciendo a las autoridades por su trabajo.
El obispo Kevin Robertson, obispo sufragáneo de la diócesis de Toronto, fue citado en la declaración diciendo que estaba “devastado al enterarse de que el incendio que destruyó el edificio de la congregación de Santa Ana en Gladstone pudo haber sido provocado deliberadamente”.
“Mientras asimilamos esta nueva realidad, oramos por la congregación de Santa Ana. Que continúen siendo una luz para la comunidad, brindando esperanza y compasión a los necesitados”, declaró Robertson. “Oramos por la persona o personas que hayan perpetrado este acto, para que puedan buscar el perdón y la sanación”.
La reverenda Hannah Johnston, sacerdotisa a cargo de Santa Ana, fue citada en la declaración diciendo que si bien la pérdida del edificio “ha sido devastadora”, la “comunidad es resiliente”.
“Nuestra fe nos dice que hay esperanza incluso ante el sufrimiento y la muerte, y que una nueva vida puede surgir de las cenizas”, dijo. “La iglesia son las personas que se reúnen para adorar y servir a los demás, y esperamos adorar y servir en este vecindario por muchos años más”.
La Iglesia de Santa Ana fue construida en 1908 en el estilo neobizantino, y 10 artistas locales contribuyeron con varios murales en su interior durante la década de 1920. El edificio fue designado oficialmente como sitio histórico nacional en 1997.
En los últimos años, ha habido un fuerte aumento en el número de iglesias en Canadá que han sido objeto de ataques violentos.
Una de las principales razones de esto fue una falsa especulación en 2021 de que se habían encontrado fosas comunes con cientos de cuerpos de niños indígenas en antiguos internados católicos.
Posteriormente, académicos criticaron tales afirmaciones, señalando que, entre otras cosas, los sitios eran parte de cementerios oficiales que incluían adultos o que, después de todo, no contenían restos de ningún niño.
Sin embargo, iglesias católicas, anglicanas y ortodoxas orientales en todo Canadá estuvieron entre las que fueron vandalizadas o incendiadas poco después de que se publicaran las acusaciones.
El año pasado, el medio de comunicación independiente canadiense True North informó que 96 iglesias habían sido profanadas, destruidas o vandalizadas después de las falsas afirmaciones sobre las fosas comunes.
